P R E P A R A C I Ó N:

 

1. En una bolsa de plástico grande, ponga la harina, sal y pimienta. Corte el pavo en cubos de 2,5 cm, métalos en la bolsa y sacúdalos para cubrirlos de harina completamente

2. Parta el tocino en tiras, póngalo en una cacerola y fríalo, revolviendo con frequencia, a fuego bajo hasta que la grasa se derrita. Sáquelo y déjelo a un lado

3. Añada una cucharada de aceite a la grasa del tocino; agregue el pavo y fríalo a fuego moderado de 2 a 3 minutos o hasta que esté ligeramente dorado; si empezara a quemarse, añada 1 cucharada de agua a la cacerola y revuelva. Retire el pavo y déjelo a un lado

4. Agregue el aceite restante a la cacerola y cocine las zanahorias, el apio, los champiñones y las chalotas durante 5 minutos o hasta que estén blandos y ligeramente dorados. Sáquelos y déjelos a un lado

5. Suba la llama, añada el vino y raspe los jugos de carne que quedaran adheridos al fondo. Hierva la mezcla hasta que haya reducido a la mitad. Vierta el caldo de pollo, vuelva a hervir y cocine hasta que se reduzca una tercia parte

6. Devulva el tocino, el pavo y las verduras a la cacerola, junto con el ajo y las hierbas de olor. Baje la llama y hierva a fuego lento, sin tapar, de 20 a 30 minutos o hasta que el pavo esté blando y la salsa se haya oscurecido y parezca jarabe. Retire las hierbas frescas

Sugerencia para servir: sirva con patatas boulangère o con baguette